Noticias, opiniones, análisis, etc., esto no es ni El País de España, ni el Clarín de Argentina y mucho menos El Últimas Noticias de Venezuela. Hablo de lo que quiero cuando quiero y como quiero. Como digo en Twitter, si no te gusta dale unfollow y ¡deja tu lloradera!
martes, 3 de abril de 2012
Errare humanum est
Las 3 entradas anteriores fueron trabajos que debido a estudios desarrollé para una cátedra. Son escritos muy básicos y sin muchos adornos, como reza el título, errar es de humanos, y ahí están mis 3 pequeñas "metidas de pata", critiquen y den su opinión al respecto.
Choroní, el escape perfecto
Viernes, último día de una semana llena de acontecer político, económico, exámenes en la universidad y stress citadino. Llevas desde la noche del jueves pensando ¿para dónde me escapo de esta locura? , y como una señal mágica de Dios, Alá, Jehová o Moisés, empieza a sonar en tu iPod, iluminando tu rostro Muerto en Choroní del olvidado grupo musical Circo Urbano. Tu cerebro empieza a maquinar lo que harás después de la hora del almuerzo. “¿Será que pido la tarde libre en la oficina y falto en la noche a la universidad?... ¡SÍ!”, te decides a embarcarte en esa aventura de sol, playa y arena. Llamas a tus panas y les comentas de la idea, a lo que ellos te responden “Claro que sí papá, vámonos ¡ya!”.
Sabes que la situación económica está difícil, pero esto es un viaje de aventura y entre todos tus panas se ayudarán.
A las tres de la tarde se encuentran con ese amigo que tiene su carrito y empieza la emoción. “¿Cuál será la vía más rápida a esta hora?” Pues desde Caracas, agarras la autopista Valle-Coche, que te llevará sin ningún error a Maracay, estado Aragua. Debes sí estar muy atento a la vía, porque casi siempre posee huecos y el asfaltado es irregular en ciertos tramos. Con buen tráfico te puede llevar una hora y tanto el trayecto. Al llegar al peaje de Palo Negro, tomas el desvío que dice Choroní, puede ir por la Avenida Las Delicias (vía Urbanización El Castaño) que te llevará directo al Parque Nacional Henri Pittier, ahí debes seguir el camino atento, pues la vía es estrecha y bordea la montaña, podrías conseguirte autobuses que vienen del pueblo, recuerda esas sabias palabras del Metro de Caracas “dejar salir es entrar más rápido”, así que de vez en cuando deja pasar algún bus.
Al llegar decides continuar un poco más y llegar a Puerto Colombia, está a diez minutos más de Choroní, y es un pueblo encantador, tiene muchos servicios al alcance de tu mano, posadas, restaurantes, discoteca, licorería, tiendas de recuerdos. En hospedaje, una de las mejores posadas que hay es Casa Pueblo, ubicada en la calle Trino Rangel. Posee 16 habitaciones desde matrimoniales hasta cuádruples. Tiene variedad, pues tienen habitaciones con ventiladores o aires acondicionados, con balcón y hamaca incluida, puedes disfrutar de los exquisitos desayunos, almuerzos y cenas del Cayena Restaurant, además de un Café, con zona WIFI, todo dentro de la posada. La atención es buena, de vez en cuando alguna que otra falla, pero es normal en posadas turísticas tan alejadas de la ciudad, los propios dueños se hacen cargo de la recepción. Y lo mejor de la posada es que estás a ¡siete minutos de la playa y tres del malecón! Los precios oscilan entre 380 Bsf. y 560 Bsf sólo por el hospedaje el fin de semana. Hay estacionamiento, seguridad privada, servicio de lavandería, agua caliente. Cabe destacar que esta posada baja un poco su “rendimiento” en temporada baja, así que no siempre será una atención inmediata.
Si deseas picar algo, también encontrarás puestos ambulantes de comida, las empanadas rellenas de camarón, guacuco y otras delicias del mar, si no estás acostumbrado a ello también encontrarás las clásicas de queso, jamón y queso, pollo y carne. A cualquier hora, el malecón de Puerto Colombia es un sitio ideal para caminar, sentarse en la noche, de encontrar otra gente, comprar algo a los artesanos, comerse algo. Los fines de semana aquí es donde los tamboreros de Choroní tocan su música, y la gente canta y baila con ellos y a disfrutar de la bebida típica, Guarapita.
En el día puedes optar por tomar una lancha y dirigirte a las playas de Cepe, a 35 minutos de Puerto Colombia, conjuga la selva con la playa, puedes alquilar toldos y sillas o bien llevarlos, hay distintos puestos de comida que tienen precios solidarios. Valle Seco, a 15 minutos del puerto, posee una barrera coralina, solo tiene kioscos para comida. Aroa, con palmeras y uveros para el ardiente sol. Uricao, se encuentra al oeste de Puerto Colombia, tiene una bahía de blancas arenas y turquesas aguas, a 45 minutos de Choroní. Y si no deseas salir al mar, puedes ir también a Playa Grande, rodeada por enormes palmeras es la playa preferida por los visitantes y nativos; posee un fuerte que oleaje resulta muy atractivo para los surfistas que se dan cita en el lugar. Tiene todos los servicios: restaurante, kioscos de comida, alquiler de sillas y toldos, duchas, baños, salvavidas y primeros auxilios.
Choroní es un pequeño paraíso anclado en las costas del estado Aragua, visítalo, disfruta de su belleza, paz y olvida tus preocupaciones en la ciudad. Eso sí, recuerda evitar dejar desperdicios, y dañar el medio ambiente, las payas son de todos así que, permite que otros puedan apreciarlas también.
A las tres de la tarde se encuentran con ese amigo que tiene su carrito y empieza la emoción. “¿Cuál será la vía más rápida a esta hora?” Pues desde Caracas, agarras la autopista Valle-Coche, que te llevará sin ningún error a Maracay, estado Aragua. Debes sí estar muy atento a la vía, porque casi siempre posee huecos y el asfaltado es irregular en ciertos tramos. Con buen tráfico te puede llevar una hora y tanto el trayecto. Al llegar al peaje de Palo Negro, tomas el desvío que dice Choroní, puede ir por la Avenida Las Delicias (vía Urbanización El Castaño) que te llevará directo al Parque Nacional Henri Pittier, ahí debes seguir el camino atento, pues la vía es estrecha y bordea la montaña, podrías conseguirte autobuses que vienen del pueblo, recuerda esas sabias palabras del Metro de Caracas “dejar salir es entrar más rápido”, así que de vez en cuando deja pasar algún bus.
Al llegar decides continuar un poco más y llegar a Puerto Colombia, está a diez minutos más de Choroní, y es un pueblo encantador, tiene muchos servicios al alcance de tu mano, posadas, restaurantes, discoteca, licorería, tiendas de recuerdos. En hospedaje, una de las mejores posadas que hay es Casa Pueblo, ubicada en la calle Trino Rangel. Posee 16 habitaciones desde matrimoniales hasta cuádruples. Tiene variedad, pues tienen habitaciones con ventiladores o aires acondicionados, con balcón y hamaca incluida, puedes disfrutar de los exquisitos desayunos, almuerzos y cenas del Cayena Restaurant, además de un Café, con zona WIFI, todo dentro de la posada. La atención es buena, de vez en cuando alguna que otra falla, pero es normal en posadas turísticas tan alejadas de la ciudad, los propios dueños se hacen cargo de la recepción. Y lo mejor de la posada es que estás a ¡siete minutos de la playa y tres del malecón! Los precios oscilan entre 380 Bsf. y 560 Bsf sólo por el hospedaje el fin de semana. Hay estacionamiento, seguridad privada, servicio de lavandería, agua caliente. Cabe destacar que esta posada baja un poco su “rendimiento” en temporada baja, así que no siempre será una atención inmediata.
Si deseas picar algo, también encontrarás puestos ambulantes de comida, las empanadas rellenas de camarón, guacuco y otras delicias del mar, si no estás acostumbrado a ello también encontrarás las clásicas de queso, jamón y queso, pollo y carne. A cualquier hora, el malecón de Puerto Colombia es un sitio ideal para caminar, sentarse en la noche, de encontrar otra gente, comprar algo a los artesanos, comerse algo. Los fines de semana aquí es donde los tamboreros de Choroní tocan su música, y la gente canta y baila con ellos y a disfrutar de la bebida típica, Guarapita.
En el día puedes optar por tomar una lancha y dirigirte a las playas de Cepe, a 35 minutos de Puerto Colombia, conjuga la selva con la playa, puedes alquilar toldos y sillas o bien llevarlos, hay distintos puestos de comida que tienen precios solidarios. Valle Seco, a 15 minutos del puerto, posee una barrera coralina, solo tiene kioscos para comida. Aroa, con palmeras y uveros para el ardiente sol. Uricao, se encuentra al oeste de Puerto Colombia, tiene una bahía de blancas arenas y turquesas aguas, a 45 minutos de Choroní. Y si no deseas salir al mar, puedes ir también a Playa Grande, rodeada por enormes palmeras es la playa preferida por los visitantes y nativos; posee un fuerte que oleaje resulta muy atractivo para los surfistas que se dan cita en el lugar. Tiene todos los servicios: restaurante, kioscos de comida, alquiler de sillas y toldos, duchas, baños, salvavidas y primeros auxilios.
Choroní es un pequeño paraíso anclado en las costas del estado Aragua, visítalo, disfruta de su belleza, paz y olvida tus preocupaciones en la ciudad. Eso sí, recuerda evitar dejar desperdicios, y dañar el medio ambiente, las payas son de todos así que, permite que otros puedan apreciarlas también.
Mérida, la Ciudad de los Caballeros
Te levantas un día y decides que no es suficiente el contacto con la naturaleza del patio de tu casa. Ves una fotografía de tus bisabuelos, en blanco y negro, adornando la sala de estar de hogar y ves que fue tomada en Mérida en el año 1927, de fondo el imponente Pico Bolívar. Tomas la determinación y te escapas esa misma semana al frío clima andino y el calor de su gente.
Decides irte en avión, y vas a tomar el vuelo en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, para arribar al Aeropuerto Alberto Carnevalli, inaugurado en 1956, éste estaba ubicado en las afueras de la ciudad, pero el rápido crecimiento urbano durante los años 60 y 70, pronto lo dejó completamente rodeado de viviendas y edificios por sus cuatro costados. Dos grandes cadenas de montañas se encuentran a su alrededor, del lado Sur está la Sierra Nevada con su pico más alto, (el Pico Bolívar), a 4978 mtsm.
Al bajar del avión, respiras la pureza del aire que existe en la ciudad de Santiago de Los Caballeros de Mérida, fundada en 1558 por Juan de Rodríguez Suárez, capitán español y que decide llamarla así por su ciudad natal Mérida, en Extremadura, España. Comúnmente llamada sólo Mérida, la ciudad posee una población de 204.879 habitantes, representando el 28% del total del estado (unos 750.000 habitantes aproximadamente). Pintoresca, está ubicada a 1600 mts. sobre el nivel del mar.
Para el hospedaje decides irte un poco más allá de la ciudad, y te alojas en el Hotel Sierra Linda, a solo 15 minutos de la ciudad de Mérida, vía Tabay, en el sector Loma Linda de Mucunután, donde podrás elegir entre cabañas, suites y habitaciones, todo dependiendo de tu “ánimo de aventura”. La vista que rodea a este hermoso complejo turístico es única, pues está enclavado entre las montañas sobre la cima de una loma a 1950 msnm. Equipadas con cocinas, y demás accesorios para estadías largas, las habitaciones son confortables y típicas. Los precios oscilan entre 300 Bsf. Y 1550 Bsf., todo depende de el número de personas que se alojaran y la temporada. De igual forma el complejo posee un restaurante Loma Linda, con gastronomía típica de los andes y una vista espectacular hacia el Pico Bolívar y precios en un rango de ni caro ni barato, o sea ni tan calvo ni con dos pelucas. Los paseo a caballo están a la orden del día, dentro de los mismos senderos del centro turístico. http://www.hotelsierralinda.com/
La primera y principal atracción turística te llevará directamente a la segunda. El Teleférico de Mérida es el más alto y más largo del mundo, a pesar de no estar en funcionamiento, es posible apreciar el trayecto de su recorrido, que llevaba al visitante hasta el Pico Espejo, junto a imponente Pico Bolívar. Según informaciones gubernamentales se espera que para mediados del año 2013 vuelva a estar en funcionamiento y así brindarle un paseo inolvidable a los visitantes y propios de la región. Pero no te desesperes, aún hay más lugares que conocer. Uno de ellos es el parque de atracciones “Los Aleros”, que conjuntamente con “La Venezuela de Antier” y “La Montaña de los Sueños” forman parte del legado de Alexis Montilla, venezolano emprendedor que conjuntamente con su familia decide erigir estos parques temáticos para revivir la historia de Los Andes, de Venezuela y de la televisión en nuestro país. La gastronomía típica de la región se basa en la tradicional arepa andina, una especie de tortilla pero hecha de trigo, deliciosa y con un sabor único.
De igual manera está la trucha, cultivada en Mérida y siendo esta su principal atracción al paladar. Pero si deseas probar algo nuevo, la Heladería Coromoto es tu destino, ostenta el Record Guiness de la heladería con nada más y nada menos que 800 sabores, desde cerveza, caraotas, pasando por pasta, rosas y carne mechada. Monumentos como el de “La Loca Luz Caraballo”, La Capilla de piedra de la Virgen de Coromoto, el Cristo Rey de la Galera, La Laguna de Mucubají, El Pico El Águila, y muchos más, son destinos obligatorios de Mérida, donde la belleza de las montañas, el frío andino, el calor de su gente y la magia de la historia confluyen en un territorio único en su estilo. Recuerda mantener la limpieza y evitar dejar desperdicios para continuar siendo poseedores de las bellezas naturales de nuestro país.
Al bajar del avión, respiras la pureza del aire que existe en la ciudad de Santiago de Los Caballeros de Mérida, fundada en 1558 por Juan de Rodríguez Suárez, capitán español y que decide llamarla así por su ciudad natal Mérida, en Extremadura, España. Comúnmente llamada sólo Mérida, la ciudad posee una población de 204.879 habitantes, representando el 28% del total del estado (unos 750.000 habitantes aproximadamente). Pintoresca, está ubicada a 1600 mts. sobre el nivel del mar.
Para el hospedaje decides irte un poco más allá de la ciudad, y te alojas en el Hotel Sierra Linda, a solo 15 minutos de la ciudad de Mérida, vía Tabay, en el sector Loma Linda de Mucunután, donde podrás elegir entre cabañas, suites y habitaciones, todo dependiendo de tu “ánimo de aventura”. La vista que rodea a este hermoso complejo turístico es única, pues está enclavado entre las montañas sobre la cima de una loma a 1950 msnm. Equipadas con cocinas, y demás accesorios para estadías largas, las habitaciones son confortables y típicas. Los precios oscilan entre 300 Bsf. Y 1550 Bsf., todo depende de el número de personas que se alojaran y la temporada. De igual forma el complejo posee un restaurante Loma Linda, con gastronomía típica de los andes y una vista espectacular hacia el Pico Bolívar y precios en un rango de ni caro ni barato, o sea ni tan calvo ni con dos pelucas. Los paseo a caballo están a la orden del día, dentro de los mismos senderos del centro turístico. http://www.hotelsierralinda.com/
La primera y principal atracción turística te llevará directamente a la segunda. El Teleférico de Mérida es el más alto y más largo del mundo, a pesar de no estar en funcionamiento, es posible apreciar el trayecto de su recorrido, que llevaba al visitante hasta el Pico Espejo, junto a imponente Pico Bolívar. Según informaciones gubernamentales se espera que para mediados del año 2013 vuelva a estar en funcionamiento y así brindarle un paseo inolvidable a los visitantes y propios de la región. Pero no te desesperes, aún hay más lugares que conocer. Uno de ellos es el parque de atracciones “Los Aleros”, que conjuntamente con “La Venezuela de Antier” y “La Montaña de los Sueños” forman parte del legado de Alexis Montilla, venezolano emprendedor que conjuntamente con su familia decide erigir estos parques temáticos para revivir la historia de Los Andes, de Venezuela y de la televisión en nuestro país. La gastronomía típica de la región se basa en la tradicional arepa andina, una especie de tortilla pero hecha de trigo, deliciosa y con un sabor único.
De igual manera está la trucha, cultivada en Mérida y siendo esta su principal atracción al paladar. Pero si deseas probar algo nuevo, la Heladería Coromoto es tu destino, ostenta el Record Guiness de la heladería con nada más y nada menos que 800 sabores, desde cerveza, caraotas, pasando por pasta, rosas y carne mechada. Monumentos como el de “La Loca Luz Caraballo”, La Capilla de piedra de la Virgen de Coromoto, el Cristo Rey de la Galera, La Laguna de Mucubají, El Pico El Águila, y muchos más, son destinos obligatorios de Mérida, donde la belleza de las montañas, el frío andino, el calor de su gente y la magia de la historia confluyen en un territorio único en su estilo. Recuerda mantener la limpieza y evitar dejar desperdicios para continuar siendo poseedores de las bellezas naturales de nuestro país.
El Baúl, el pueblo del pasado.
Cuando decidimos viajar y conocer a nuestro país, no estamos exentos de descubrir cosas maravillosas o terribles. Un viaje a los llanos venezolanos y específicamente al pueblo de El Baúl, en el estado Cojedes, es más una aventura que un paseo de relajación. ¿Desde dónde puede empezar ésta historia? Pues desde que decidimos emprender esa odisea.
Ubicado en el municipio Girardot del estado Cojedes, se encuentra un pueblo que quizá es uno de los pocos lugares en que nos viene el recuerdo de viejas novelas de RCTV como Pura Sangre, un pueblo que casi vive en el pasado, más aún, tiene adelantos tecnológicos de nuestra época. Una Plaza Bolívar bien cuidada, pero con algunos habitantes poco aseados que dejan manchas en el suelo tanto de la plaza como en las calles del pueblo, de tabaco para mascar, mejor conocido como Chimó, que son escupidos sin contemplación alguna.
Llegar a El Baúl es algo complicado, si nos encontramos en Caracas y no tenemos auto propio debemos tomar un autobús (bien sea en el terminal La Bandera o en Aeroexpresos Ejecutivos, para así disfrutar del último adelanto en materia de viaje por carretera que tendremos al irnos en esta epopeya) que nos deje en el terminal Big Low de Valencia, estado Carabobo. Ahí tomaremos otro autobús que nos llevará a Tinaco, ya en el estado Cojedes. Al arribar, le diremos al conductor que nos deje frente a los autobuses que van al pueblo. El viaje dura alrededor de 7 horas.
Al llegar al pueblo, debemos tener muy claro que nunca estaremos en una ciudad. Y que el acceso a algunos servicios será limitado, por ejemplo, es muy común que se vaya la luz en todo el pueblo incluso por horas muy extensas. Para los que les gusta la carne en vara, disfrutaran su estadía, pues es el plato por excelencia de la localidad, vegetarianos, deben abstenerse pues vivirán un calvario culinario. En cuanto a bebidas, la cerveza ligera (Polar Light) es consumido como mucha o quizá con demasiada regularidad. Los que tengan gustos “refinados” pasarán el tiempo tomando agua.
Los lugares para pernoctar son a decir verdad contados con la mitad de los dedos de la mano. La posada más “decente” es la Puerto España, atendido por su dueña la señora Lola, advertimos que Doña Lola tiene un carácter muy fuerte pero hay chance una buena conversación, las diferencias desaparecen. Sus precios varían desde 170 Bs. a 430 Bs. por noche, dependiendo del número de personas. Si la estadía es relativamente larga, se puede hablar con los lugareños para averiguar que casa podría estar en alquiler, como sabemos en un pueblo no existen mayores comodidades, una casa con agua sin calentador (no es necesario, pues las temperaturas son bastante altas, es un lugar muy caluroso), electricidad y en algunos sitios se incluyen camas. El precio base es 400 Bs. por mes.
Para la recreación del visitante, existen varios lugares nocturnos, sencillos. El coleo es otra atracción común en este y en muchos pueblos llaneros, no la compartimos, pero son tradiciones propias del lugar. De igual forma, para los amantes de edificios antiguos, existe la iglesia del pueblo, que fue construida a mediados de 1700, y las ruinas de “La casa de Los Españoles”, a pesar de quedar muy poco de la casa, es una estructura imponente y que muestra como eran edificadas las casa de aquellos días. También encontramos a las afueras del pueblo el conocido “Hato Piñero”centro de contacto directo con las labores propias del campo, cría de ganado, siembra, etc. y donde se puede apreciar una gran flora y fauna algunos de los mamíferos que se ven regularmente en Hato Piñero incluyen zorros, ocelotes, monos capuchinos y araguatos, chigüires, venados, tapires, osos hormigueros y nutrias. Con un paisaje maravilloso, es capaz de hacernos olvidar todos nuestros problemas. Actualmente está siendo administrado por el estado venezolano en el marco de los proyectos de producción socialista del campo.
Una de las historias más interesantes del pueblo es la de “La Cadena”, que se encuentra en la entrada de uno de los fundos cercanos que se utilizaba para la deforestación y la siembra. Esta cadena es proveniente de algún buque y fue comprada con éste propósito, sus eslabones son de aproximadamente 70 cm. y es bastante larga. Las historias más comunes de cómo llego la cadena ahí van desde, que fueron traídas en la época de la colonia por los barcos españoles al llegar a los puertos del pueblo cuando éste estaba rodeado por el mar, o que data de la prehistoria y fue forjada por nuestros antepasados en esa zona.
Historias, eso podemos encontrar aquí en este pueblo, perdido en el tiempo. Historias y vivencias que nos dejaran una marca tanto en la memoria, como en el corazón, siempre y cuando seamos un buen venezolano.
Ubicado en el municipio Girardot del estado Cojedes, se encuentra un pueblo que quizá es uno de los pocos lugares en que nos viene el recuerdo de viejas novelas de RCTV como Pura Sangre, un pueblo que casi vive en el pasado, más aún, tiene adelantos tecnológicos de nuestra época. Una Plaza Bolívar bien cuidada, pero con algunos habitantes poco aseados que dejan manchas en el suelo tanto de la plaza como en las calles del pueblo, de tabaco para mascar, mejor conocido como Chimó, que son escupidos sin contemplación alguna.


Al llegar al pueblo, debemos tener muy claro que nunca estaremos en una ciudad. Y que el acceso a algunos servicios será limitado, por ejemplo, es muy común que se vaya la luz en todo el pueblo incluso por horas muy extensas. Para los que les gusta la carne en vara, disfrutaran su estadía, pues es el plato por excelencia de la localidad, vegetarianos, deben abstenerse pues vivirán un calvario culinario. En cuanto a bebidas, la cerveza ligera (Polar Light) es consumido como mucha o quizá con demasiada regularidad. Los que tengan gustos “refinados” pasarán el tiempo tomando agua.
Los lugares para pernoctar son a decir verdad contados con la mitad de los dedos de la mano. La posada más “decente” es la Puerto España, atendido por su dueña la señora Lola, advertimos que Doña Lola tiene un carácter muy fuerte pero hay chance una buena conversación, las diferencias desaparecen. Sus precios varían desde 170 Bs. a 430 Bs. por noche, dependiendo del número de personas. Si la estadía es relativamente larga, se puede hablar con los lugareños para averiguar que casa podría estar en alquiler, como sabemos en un pueblo no existen mayores comodidades, una casa con agua sin calentador (no es necesario, pues las temperaturas son bastante altas, es un lugar muy caluroso), electricidad y en algunos sitios se incluyen camas. El precio base es 400 Bs. por mes.
Para la recreación del visitante, existen varios lugares nocturnos, sencillos. El coleo es otra atracción común en este y en muchos pueblos llaneros, no la compartimos, pero son tradiciones propias del lugar. De igual forma, para los amantes de edificios antiguos, existe la iglesia del pueblo, que fue construida a mediados de 1700, y las ruinas de “La casa de Los Españoles”, a pesar de quedar muy poco de la casa, es una estructura imponente y que muestra como eran edificadas las casa de aquellos días. También encontramos a las afueras del pueblo el conocido “Hato Piñero”centro de contacto directo con las labores propias del campo, cría de ganado, siembra, etc. y donde se puede apreciar una gran flora y fauna algunos de los mamíferos que se ven regularmente en Hato Piñero incluyen zorros, ocelotes, monos capuchinos y araguatos, chigüires, venados, tapires, osos hormigueros y nutrias. Con un paisaje maravilloso, es capaz de hacernos olvidar todos nuestros problemas. Actualmente está siendo administrado por el estado venezolano en el marco de los proyectos de producción socialista del campo.

Una de las historias más interesantes del pueblo es la de “La Cadena”, que se encuentra en la entrada de uno de los fundos cercanos que se utilizaba para la deforestación y la siembra. Esta cadena es proveniente de algún buque y fue comprada con éste propósito, sus eslabones son de aproximadamente 70 cm. y es bastante larga. Las historias más comunes de cómo llego la cadena ahí van desde, que fueron traídas en la época de la colonia por los barcos españoles al llegar a los puertos del pueblo cuando éste estaba rodeado por el mar, o que data de la prehistoria y fue forjada por nuestros antepasados en esa zona.

Historias, eso podemos encontrar aquí en este pueblo, perdido en el tiempo. Historias y vivencias que nos dejaran una marca tanto en la memoria, como en el corazón, siempre y cuando seamos un buen venezolano.
domingo, 1 de abril de 2012
Todo tiene su Alpha
Empezar un blog es como tener un hijo por primera vez, no sabes como manejarlo (al menos así es mi caso), decidí entrar en el mundo del blogging quizá por curiosidad, por desahogo o simplemente por "meterme en materia". Actualmente curso estudios de Comunicación Social, y aunque esto no me lo exige ninguna materia (por ahora) es bueno que esta experiencia me sirva como antesala a lo que vendrá después de recibir ese cartoncito que me acredita como comunicador, y que a muchos los acredita a "Habladores de Paja certificados". En fin, probaré suerte, intentaré ser lo más variado posible. Y los que se sientan identificados sencillamente díganlo, expresen sus ideas, eso sí, cero arrebatos de pasión verbal, es decir, CERO INSULTOS (esto no incluye al autor!).
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